SER O HACER, QUE ES LO MAS IMPORTANTE?
Mas el fruto del Espíritu es:amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre,
templanza. Contra tales cosas no hay ley.
Gálatas 5:22,23
Una de las prácticas distintivas
de toda persona organizada es confeccionar una lista de lo que debe hacer
durante el día. Las personas organizadas comienzan el
día con su lista de lo que deben hacer, y hacen mucho más que los que no tienen
esa capacidad. Sin embargo, las Sagradas Escrituras dan más
importancia al ser que al hacer. No nos apremia a tener una lista de
cosas que debemos hacer, pero sí presenta de manera insistente una descripción
de lo que debemos ser. Fue lo que Jesús quiso enseñar cuando dijo en la casa de
sus amigos de Betania: «Marta,
Marta, afanada estás con muchas
cosas».
En otras palabras, es como si Jesús le
hubiera dicho: «Estás preocupada con la lista de cosas que quieres hacer, pero
te has olvidado que es más importante ser que hacer.» Por supuesto que es
importante hacer lo que tenemos que realizar. Cumplir nuestros deberes, llevar
la vida adelante, es una obligación ineludible que todos tenemos que cumplir. Es
necesario finalizar ciertas tareas, concluir ciertos proyectos, o asistir a
ciertas reuniones, y es conveniente hacer todo ello de la forma más eficaz
posible. Pero lo más importante para tener una relaciòn intima y parara siempre
con Dios, es quiénes somos. Si tus más grandes intereses se centran en la lista
de las cosas que tienes que hacer durante el día, lo más probable es que te
postres ante el Señor para decirle: «Dios
mio, tengo que hacer muchas cosas hoy. Pongo todos mis compromisos en tus manos
para que me ayudes. Por favor, quédate junto a mí. Ayúdame y
bendíceme».
En cambio, si tu mayor preocupación es ser lo
que debes ser, ser como El le dirás a Dios: «Hoy
quiero ser como Jesús. Ayúdame a imitarlo, Dios mío. Deseo manifestar su amor, su paz,
su tranquilidad, su mansedumbre, su bondad, y su paciencia. Ayúdame a ser
humilde, y a compartir con los demás lo que tú me das. Ayudame a interesarme màs
en los demàs en mis hermanos en sus necesidades reales en darles una mano
pràctica màs bien que preocuparme de hacer mis cosas aunque sean de natura
espiritual, Ayúdame a ser un testigo de tu poder transformador. Transforma mi
carácter para reflejar la paz y tu pureza. Hazme lo que tú quieres que sea.
Amén».Y todo esto marcarà una gran diferencia en si somos verdaderamente una
Persona con actitud espiritual o simplemente una persona que hace tantas
actividades espirituales.Si nuestra prioridad serà ser personas espirituales
veremos que nuestras palabras se transformaran en hechos con la ayuda de Dios
Jehovà y darà gloria a su nombre en lo secreto aun cuando nadie te vea quien
esta en lo Alto te ve y te
bendecirà.
Para que tu lista de todo lo que quieres ser
sea una realidad en tu vida, invita al espiritu santo para que te ayude y te
impulse a hacer buenas obras para tu propio provecho y el de todos los que te
rodean. Considérate un instrumento en las manos de Dios deseoso de ser lleno de
los frutos del Espíritu Santo. Sé hoy lo que Dios quiere que seas. No te dejes
enredar como Marta. No pierdas de vista la «una cosa» que María
escogió: ser como Jesús y vivir como
él.
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